Mi actividad es agrícola ganadera, en la localidad de Maciel que más o menos tiene 9.000 habitantes. En el Centro Primario debe haber unos 200 productores en actividad.

En la zona, la mayoría es campo agrícola, lo más sembrado es la soja, pero en este último año se está complementando con maíz, tratando de hacer una rotación a los cultivos. En su momento fue muy ganadera, con mucho tambo.

Mis abuelos tenían tambo. Pero, como vino el Boom de la soja, nosotros en el año 77 ya la sembrábamos, o sea, que la siembra de soja es la que cambió la actividad de todos los productores.

La inmigración en Maciel

Nosotros somos descendientes de italianos por parte de mi padre Pablo Fabbro y Fernández por parte de mi mamá, mis abuelos los dos de Asturias se conocieron en el barco cuando vinieron. En la actualidad tenemos el campo de las dos partes: de mi papá y de mi mamá. Ellos al afincarse empezaron con el tambo, progresaron con esta actividad y compraron la tierra. En la región hay distintas colonias, tenemos más que todo italiano y español y también una zona de vascos.

Actividad del Consejo Primario de AFA en Maciel

Hoy la Cooperativa de Agricultores Federados Argentinos -AFA- se está caracterizando por ayudar mucho el productor, más que otros años y ya lo viene haciendo, en esta reunión lo dijo el presidente Darío Marinozzi que “tenemos un año difícil, de cosechas malas y AFA está saliendo al frente con financiamiento y refinanciamiento de las deudas y  a tasa cero también”.

Se está apoyando mucho al campo porque lamentablemente vinieron años malos y salió AFA a ayudar, como siempre lo hizo al productor de la Cooperativa. Hay muchos millones de dólares en la calle que lo tienen los productores; por supuesto esto es deuda de los productores hacia la Cooperativa. Hubo que ayudarlos, sabemos que ellos lo van a devolver. A pesar de todo, los productores se acercaron a la Cooperativa diciendo que quieren producir, o sea que muy endeudados siguen sembrando siempre y esto quiere decir que van a salir adelante, qué quieren pagar, no quieren poner la plata en los Bancos, como se estaba diciendo.

Más allá de cómo está el dólar  o si se va a aplicar el dólar soja  o no, siguen sembrando. Fueron realmente años malos, nunca hemos vivido algo así. Podía pasar que una cosecha falle, pero la otra no: aquí fallaron todas juntas y se generó una desazón en el pueblo, parece un pueblo fantasma, porque era un pueblo que  tenía relativamente mucho movimiento.

Los que pasaban por la ruta 11 – nosotros estamos entre Santa Fe y Rosario- decían que  era un “pueblo Las Vegas” y ahora termina siendo un pueblo fantasma. Hoy tenemos un Congreso de jóvenes, pero muchos campos están desapareciendo o se alquilan porque no se consigue la rentabilidad.

En situaciones difíciles deben tallar las Políticas Públicas

Aquí es donde viene a tallar la Política Pública, deben cambiar un poco los gobiernos y dar al campo lo que necesita, no estamos pidiendo nada raro. Solamente retirando el 30% de retenciones que el gobierno toma cuando se vende el grano, que no ayuda en nada, y  nos lleva a la pelea del ciudadano con la gente campo y aunque somos iguales a los demás nos tienen diferenciados.

Los jóvenes Productores 4.0

Otro aspecto de la vida es bueno porque ellos quieren las cosas más rápidas, pero vamos a ver qué nos permite, cómo podemos llegar de este modo sin dañar al otro, sin que sea algo conseguido por izquierda; hoy todo se consigue por izquierda se busca la vía rápida y se da un recibo de algo que no me corresponde. Entonces, aunque esa es la salida más rápida, no tiene que ser así.

Hoy quedó claro el ejemplo, los jóvenes de la generación nueva demandan resultados rápidos. El joven decide de hoy para mañana, tal vez a nosotros nos llevaría un año la decisión, pero ellos lo quieren de este modo.

Al campo lo siento en el corazón

Me encanta el campo, crecí en él y voy a cumplir la semana que viene 63 años, en el campo me casé, restauramos el tambo y me quedé ahí, pero después por todos los contratiempos que hemos tenido, aunque somos una familia grande tuvimos que separarnos y dividirnos; sigo manteniendo mi casa, porque el campo me gusta, sobre todo la parte ganadera, lo siento en el corazón y mis hijos también.

Pero mis hijos dicen que en el campo no quieren vivir, porque en realidad son campos chicos y quieren tener otro trabajo del que van a vivir y el campo lo van a disfrutar. A mí me tocó la época de los campos que nosotros tenemos que uno lo recibí por mi mamá. los otros lo compramos, me costó tenerlo, en el caso de mi abuelo lo perdió y mi padre con nosotros lo recuperó, Siento que seguir adelante es mi responsabilidad.

“Lo que yo te mando”

Hace seis años que estoy en AFA, en el Consejo nunca estuve. Pero sé por distintas posiciones entre los hermanos que todos somos de distintos pareceres y mi viejo nos llevó a tomar decisiones.

Yo ya estaba en la iglesia evangélica y ahí fui viendo que no tenemos límites, para cada uno el techo es Dios y hay que buscar de la palabra de Dios siempre.

Yo soy coordinador en la iglesia, tengo gente acá y damos la palabra, y no soy ejemplo para nada porque el apóstol Pablo no era ejemplo, pero fue mandado por Jesús a hacer “lo que yo te mando”; nosotros hacemos lo mismo. Personalmente yo no soy ejemplo y de esto me tengo que aferrar.  

Si Dios quiere yo estoy seguro de lo que estoy haciendo, estoy seguro de que cuando me muera tengo la vida eterna si es lo como Dios manda, yo hago lo que Dios quiere. No puedo confesar que el señor es mi salvador y después hacer lo que yo quiero.